Algunos de los miles de inversores de Ouya aún no tienen su consola

Como sabéis, Ouya se puso ayer a la venta, con gran acogida por parte del público. Tanto es así que muchos distribuidores se han quedado sin dispositivos, y lo peor de todo: algunos de aquellos generosos gamers que en su día realizaron una inversión de 99 $ o más en el proyecto Kickstarter, y que según las condiciones del proyecto recibirían a cambio una consola, todavía no tienen su aparato.

Cuando el proyecto Ouya echó a andar en Kickstarter, los desarrolladores ofrecieron una serie de retribuciones para quienes decidieran invertir en la propuesta. En concreto, a todos los inversores cuyo donativo superara los 99 $ se les prometió de que serían los primeros en recibir la consola y el controlador en sus casas.

Pero no ha sido así, y ahora la imagen de la marca Ouya está seriamente dañada. No puede ser que financies un proyecto a través de donaciones particulares y que en cuanto estás en el mercado, apenas unos meses después, lo primero que hacer sea incumplir los acuerdos alcanzados con tus inversores. Eso está muy feo.
 

El fundador de Ouya en persona se compromete con cada uno de los afetados

 
Como no podía ser de otro modo, el fundador de Ouya, Julie Uhrman, ha dado la cara y ha prometido resolver el problema lo antes posible:

"Estoy apesadumbrado. Algunos de vosotros todavía no habéis recibido vuestra Ouya, y a vosotros, os pido disculpas. No prometo enviaros la consola a la mayoría antes de que se comercialice en las tiendas. Prometo enviárosla a todos vosotros".

 
Leyendo el comunicado de Uhrman la verdad es que me quedo más tranquilo. Eso es exactamente lo que quería oír. Un compromiso en toda regla, sin excusas, sin medias tintas. Un empresario cumpliendo con sus compromisos, con todos y cada uno de ellos. La palabra está para mantenerla.
 
Vía | Kickstarter
Página Oficial