Dicen (erróneamente) que la población infantil que sólo juega a videojuegos tiene sobrepeso. Que es insano para un niño pasar horas sentado con la 'maquinita' en vez de salir a "trepar árboles". Un argumento fácil de rebatir: el sobrepeso infantil depende de la educación alimentaria y, en general, de sus rutinas. Sin embargo, a algunos les dio por afirmar que los juegos con sensores de movimiento ayudaban a controlar el peso... y va a ser que no.
Un estudio de Baylor College of Medicine de Houston (Texas) demuestra que para nada, que no sirven como sustituto de la actividad física. Padres del mundo: vuestro gozo en un pozo. No queda más remedio que sacar a los chicos a pasear, jugar al fúbol, patinar... La Wii servirá para otras cosas, pero no para prevenir la acumulación de grasa. Veamos cómo llegaron a dicha conclusión.