MSU1 libera el poder de tu SNES

No he podido evitarlo. La nostalgia de ver volver a la vida clásicos como 'The Legend Of Zelda' de Super Nintendo, 'Castle of Illusion' y 'DuckTales' ha hecho que mi corazoncito viaje a un pasado lejano donde ingenuamente se soñaba con una medida de megas por cartucho.

Eran tiempos donde la ahora cuestionada segunda mando era la única posibilidad de mantener al día tu afición y las consolas solo servían para jugar y no para pedirles que te trajeran una Pizza a casa.

Me parece el momento ideal para hablaros del MSU1, justo ahora que las consolas han perdido por completo su identidad como máquinas independientes transformándose en ordenadores personales con ligeros retoques y limitaciones.

En la época dorada de los 16 bits se soñaba con la tecnología igual que ahora. A la obsesión actual por los polígonos, las resoluciones y los efectos de partículas la sustituía el continuo debate por el número de megabits que tenía un cartucho y el tamaño de los sprites 2d.

Y es que si había algo que limitaba nuestros sueños en aquella época era el inmenso coste que tenían los eficaces cartuchos de videojuegos. En la actualidad, gracias a los ridículos precios de los formatos ópticos como el Dvd y el BluRay los límites a la imaginación de los desarrolladores los pone exclusivamente la pereza que tengan para optimizar su código.

Los costes de un cartucho eran enormes, y representaban una fracción muy importante del coste total de un juego, a veces hasta el 50%. Hoy en día, el dinero se va para pagarle el jacuzzi al CEO de Activision Robert Kotick. Ayer, lo mas cercano al lujo, era que tan solo una compañía como SNK podía permitirse sacar cartuchos de 100 megas y más.

Cuando Sega lanzó su soporte de juegos para CD-Rom no fuimos pocos los que nos emocionamos en esperar el mismo movimiento por parte de la entonces hegemónica Nintendo. La historia en la que naufragó aquella propuesta recordaremos que llega a su fin con Sony entrando en el mercado con Playstation.

 

MSU1: El CD ROM que Super Nintendo nunca tuvo

 

 

A muchos de los que vivimos aquellos años siempre nos quedó la espinita clavada de saber de que habría sido capaz nuestro cerebro de la bestia con megas sin límite a su disposición y una calidad de audio aun superior a la que equipaba.

Por lo visto, alguno de aquellos niños mantuvo el sueño durante mucho tiempo y acabo aprendiendo a programar. Hablaremos de él con el sobrenombre de Byuu.

Byuu es el creador de los emuladores más fieles a Super Nintendo que se conocen, el Bsnes. Su conocimiento de la máquina es tan enfermizo que diseño un emulador que ha conseguido clonar en un 100% el funcionamiento de la consola sin emplear ningún truco. A todos los efectos, un juego funciona en Bsnes del mismo modo que funcionaría en una Super Nintendo autentica, solo que de manera virtual.

Para Byuu, conseguir una gesta tan absoluta se le quedo corto. Rescato la idea de soñar con la capacidad que habría tenido la consola teniendo megas baratos a su disposición y diseño el MSU1.

 

El MSU1 es un proyecto de chip perfectamente documentado y factible de fabricar que permite que una Super Nintendo pueda manejar hasta 4 Gigabytes de Datos. Con una capacidad tan grande la consola es capaz de ejecutar vÍdeo a una calidad respetable y ofrecer audio con calidad CD sin perdida.

Es un chip de expansión bastante sencillo, no muy distinto de otros que engrosaban las listas de algunos de los juegos de última hornada de Super Nintendo, como el Super Fx de 'StarFox' o los DSP incluidos en 'Pilotwings' , 'Super Mario Kart' y otros.

 

MSU1 muestra los límites de SNES

 

 

La actual generación de consolas ha sido posiblemente la que más ha durado de la historia. Quitando la veterana NES, los ciclos de renovación de cada generación se solían estimar en unos 5 años, quedándonos muchas veces con la sensación de que a esa consola que dejamos atrás obsoleta quizás se le podría haber sacado un poco más de jugo. MSU1 nos muestra como Super Nintendo era perfectamente capaz de ejecutar video a tasas de 30 FPS con buena calidad y ofrecer un audio totalmente cristalino si se libraba de las restricciones impuestas por el formato cartucho.

 

MSU1 ha nacido para impulsar el desarrollo retro

 

 

Alguno pensara que gente como Byuu son chalados categoría AAA, pero lo cierto es que la Super Nintendo nunca tuvo juegos indie visibles dada la restrictiva política de Nintendo en el pasado a la hora de suministrar datos de sus maquinas y la dificultad de programar sin casi herramientas de desarrollo intermedias como en la actualidad.

Además de materializar el sueño del CD-Rom que Super Nintendo nunca tuvo, el MSU1 se convierte en una plataforma estupenda para experimentar con desarrollos indie.

En los foros de Internet se discute acerca de la posibilidad que este chip brinda para crear versiones mejoradas de antiguos juegos añadiéndoles introducciones de anime o mejorando sus bandas sonoras. Entre algunas muestras tenemos el 'Chrono Trigger' con las intros de la versión de Playstation y numerosas iteraciones de Mario World con bandas sonoras exclusivas.

 

MSU1 ya tiene su primer juego

 

 

A pesar de que el chip solo esta concebido a nivel virtual y que nadie se ha hecho cargo del coste que representaría fabricar un cartucho con el incorporado, dispositivos de carga de roms como SD2Snes tienen implementadas la totalidad de sus funciones.

Esto ha permitido el desarrollo del primer y por el momento único juego completo para MSU1, una adaptación del juego original para LaserDisc 'Road Avenger' que ya visitó al Mega Cd hace una eternidad.

Podemos ver como los 256 colores en pantalla de Super Nintendo dan la talla para conseguir una adaptación casi perfecta.

 

MSU1: Recuerdo de una época

 

MSU1 es el recuerdo de una época donde el soporte lo era todo y marcaba la diferencia clara entre ordenadores y consolas. Asistiendo como estamos a la mimetización de estas con los Pc de toda la vida y a la previsible caída del soporte físico en pos de la venta o alquiler de licencias digitales, no había mejor momento para mirar atrás y dedicaros esta perla retro. Larga vida a las consolas.