Ley y pirateo: Gallardon la lía parda reformando el Codigo Penal

Afortunadamente, en esta página no hablo de política. Y digo afortunadamente, porque si materializase algunas de mis charlas con amigos al respecto, seguro que nos chapaban la web por ley y tendría que coger un billete con destino ignoto, a fin de evitar la tan cacareada cuestión del jabón carcelario.

Pero esta semana toca hacer una pequeña excepción y tangencialmente comentar la nueva reforma del código penal en España. Esa que promueve nuestro ilustre ministro de justicia, Alberto Ruiz Gallardón.

Sin entrar en descripciones muy farragosas, la nueva reforma prevé penas de cárcel y aumentos de estas para los delitos relacionados con la propiedad intelectual, esto es, el asunto conocido por todos como el pirateo de consolas, las descargas web, etc.

Estos delitos tendrán pena de hasta 6 años de cárcel, delitos tan peligrosos para la sociedad como modificar consolas o tener una pagina de descargas. Para alucinar un poco, las penas para malos tratos, violación o prostitución infantil son inferiores.

Esto era lo que se planteaba en un primer borrador fechado en mayo, de 1 año de cárcel a 6, sin matices.

Afortunadamente y antes de que España parezca Megacity One, la ciudad del personaje de cómic Juez Dredd donde la justicia era pura ejecución, se han introducido en el borrador definitivo, los matices de explotación económica, en cuanto a gestionar una web de enlaces y el requisito de finalidad comercial, en cuanto a la modificación de consolas y teléfonos.

Más que nada porque sino solo habría que mirar las cifras de ventas de consolas para ir ampliando las cárceles.

 

Una ley hecha a medida de las empresas.

 

La nueva ley convierte a cualquiera que tenga una web de descargas, que desbloquee un móvil o a aquellos que instalan un firmware customizado o chip a una consola, en criminales más castigados que un violador o un proxeneta infantil.

Así que informados estáis, si le tenéis ojeriza a alguien, decidle que le pagáis 30 euros porque os ponga el chip de la Play  y hacedle unas fotos para la posteridad. Gracias a Gallardón y su delirante modificación de la ley existente, puede que descubra los placeres de no pisar la playa en más de un lustro.

Vía | Jaque Perpetuo

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