¿Debería Nintendo ponerse al día con juegos más adultos?

Si hay un lugar donde puedes encontrar cualquier cosa, ese es cualquier mercadillo de barrio en Asia. Desde sandías verdes hasta gorras de Arare con alas y todo, pasando un iPhone falso dentro de una funda de oso panda perfumado con manzana. Y aun así, nada de eso me pareció más estrambótico que con lo que me topé hace un par de semanas entre una pila de libros budistas y un Walkman de los de antaño. Un cartucho del 'Killer Instinct' de Super Nintendo.

No es que encontrarse cartuchos de los 16 bits sea muy difícil en Asia. Lo que golpeó mi memoria aquella tarde fue recordar que Nintendo tenía juegos con nombres tan explícitos como "instinto asesino". Y entonces pensé que el fallo de la gran N para no retener a sus fieles seguidores de los años 90 fue que no los trató con naturalidad. Sino que los confundieron con Benjamin Button.

Porque Nintendo, en lugar de crecer con sus fans y ofrecerles a quienes amaban sus juegos de niños una versión adulta en sus futuras consolas, lo que fue haciendo fue infantilizarse aún más. Igual que Benjamin Button nace adulto en su película y va haciéndose niño con el paso del tiempo. Así se entiende que los que jugaban con Nintendo de niños se olviden de Miyamoto y compañía de adultos. ¿Hay marcha atrás para la gran N?

Seguramente, en el seno de la compañía que originalmente se dedicaban a hacer cartas piensan que sí. O al menos lo esperan. Porque con Wii U buscan a ese público perdido hace demasiado tiempo. Pero claro, ¿le han puesto ganas? Pues no muchas. Ya que se dedican a intentar que otras desarrolladoras cren juegos más, digámosle, adultos para Wii U.

Y claro, al final en Wii U tenemos 'Mass Effect 3' o 'Call of Duty'. Como en las consolas de Sony o Microsoft. ¿Y qué tiene eso de novedad? Muy poquito. Nintendo necesita exclusivas. Y de las potentes.

 

¿Quiere Nintendo ganarse a las audiencias adultas? Necesita exclusivas

 

Vale, más de uno dirá que Nintendo tiene exclusivas. Y que tiene muchas. Es cierto. ¿Pero qué clase de exclusivas? Todas ellas familiares.

He intentado hacer memoria. Pensar en un juego de Nintendo que fuese más adulto. En algo que tuviese, digamos, sangre. Porque es cierto que un juego no ha de tener sangre para ser bueno, pero la violencia es adictiva y da pie a muy buenos juegos.

Pues bien, si alguien puede echarme un cable se lo agradeceré, porque no he encontrado nada violento en Nintendo. Y lo siento, 'Smash Bros' no es violento si me pongo a pensar en una seta pegando patadas.

En la gran N tienen muchos y muy buenos juegos, pero nada que sea muy adulto. ¿Y acaso no estaría bien un 'Zelda' más adulto? Ahora mismo los fans me llamarán sacrílego, pero yo disfrutaba de las aventuras de Link cuando era un chaval, y me hubiese encantado que él hubiese crecido conmigo.

La gente que jugaba con 'Zelda' hace diez o quince años ya no juega con 'Zelda'. Al menos no mayoritariamente. Porque se hicieron mayores, y Link se quedó infantil como Peter Pan.

Viendo ahora el reboot de 'Tomb Raider' y el éxito cosechado, se me ocurre que Nintendo podría cazar a miles de jugadores si hiciese el estreno de Link en sus aventuras en un juego con una gran historia, mucho más adulto y violento. Con amigos que mueren y sufrimiento.

Porque un juego adulto no significa sólo que haya sangre o se dispare mucho. Quiere decir que tiene una trama elaborada, en el que se sufre y se ríe. Donde se pasa mal y se disfruta. Y en las consolas de Shigeru Miyamoto y compañía no tenemos eso. Una pena.

 

Toda una historia intentando captar al público familiar

 

Otro gran problema es que Nintendo siempre trata de captar a un público joven y familiar. Eso está muy bien, ya que es un nicho de mercado fantástico. Pero es difícil. Porque hay audiencias que han ido creciendo con cada saga.

Hace poco lo explicaba David Cage de Quantic Dream, artífice de 'Heavy Rain'. Los jugadores han crecido y él ha crecido con ellos, ofreciendo un tipo de juego distinto. Y en la gran N no han hecho eso. En Nintendo han visto cómo generaciones se enganchaban a sus juegos y luego se fugaban a otros sistemas.

Es como si Nintendo fuese una escuela. Durante una serie de años, es el sistema de videojuegos favorito. Pero cuando se acaba la secundaria, sus jugadores se mueven hacia otras plataformas.

Ahora con Wii U quieren retomar el camino perdido. Pero claro, no tienen exclusivas y siguen sin querer programar juegos adultos. ¿Cómo pueden hacerlo así?

 

Y de paso, descuidan a su público familiar

 

Luego está, claro, otro de los grandes fallos capitales de Nintendo. Desde N64 empezó a meterse más a fondo en el mercado más familiar. Con GameCube intentó coquetear con los juegos adultos al tener exclusivas de 'Resident Evil', pero poco más. Y con Wii ya se lanzó directamente a los chavales y a las familias. Al público más casual también.

Y les fue muy bien. Wii fue un éxito alucinante y, vale, no tenía nada de violento ni muchos juegos adultos. ¿Qué más daba? Cada época de Navidad se agotaba.

Ahora, con Wii U, no sólo no ha dejado claro para qué sirve el nuevo mando. Sino que además se ha olvidado de quienes le han pagado el pan. Quieren volver a mirar a los jugadores más adultos, pero éstos no confían en ellos. Y al público familiar lo tienen descuidado.

Wii U no está siendo un éxito. Y no lo será mientras no se decida hacia dónde tiene que tirar. O en Nintendo empiezan a crear exclusivas, ya sean adultas o familiares, o muy crudo lo tienen. Sobre todo cuando Sony y Microsoft se pongan las pilas y saquen máquinas nuevas.